A Renault no le quedaba otra. Las evidencias de que el accidente de Nelsinho Piquet en Singapur 2008 fue intencionado eran cada vez más evidentes. Sólo el despide de Flavio Briatore podía evitar daños mayores a la escudería del rombo. Pat Symonds, como responsable de las estrategias del equipo, también ha caído con Flavio.
Desde luego que Briatore tenía que pagar si, como todo parece indicar, dio a Nelsinho la orden de estrellarse en la vuelta 14 del GP de Singapur, pero creo que no debería hacerse cargo de toda la factura.
Nelsinho Piquet, máximo responsable de estrellarse contra el muro y de callar durante un año, también debería pagar por lo ocurrido, aunque parece que la FIA (Max Mosley, se entiende) tiene suficiente con la cabeza de Flavio.
Una triste manera de terminar la carrera de uno de los personajes más emblemáticos de la Fórmula 1. Seguro que el paddock echará de menos a Flavio Briatore porque nunca ha dejado a nadie indiferente.
Desde que en 1989 ingresó en el nuevo equipo Benetton, antiguo Toleman, Flavio dio muestras de un especial talento para desenvolverse en la Fórmula 1.
Fichó a un joven Michael Schumacher en 1991 y tres años después el piloto alemán dio el primer título mundial al nuevo equipo. Repitió el éxito Briatore cuando fichó a Fernando Alonso para Renault y el asturiano le dio dos mundiales consecutivos.
Fuera de las carreras Flavio también ha sido envidiado por estar siempre acompañado de bellas modelos como Naomi Campbell, Adriana Volpe o Heidi Klum, ésta última madre de su hija Leni. En 2008 se casó con la modelo italiana Elisabetta Gregoraci a la que sigue unido hoy día.
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